el tiempo pasa muy rapido

Finaliza el verano. Un verano que aunque ahora parece breve, ha transcurrido con la laxa lentitud del calor sofocante y los cambios de humor con  una frecuencia tal, que parece que Sergio es una bomba de componentes químicos y cualquier mal movimiento puede provocar su explosión. Ya no solo se trata de evitar bromas o dobles sentidos hacia el, eso es algo que ha quedado descartado hace mucho tiempo. Ahora, hasta cualquier broma entre su madre y yo puede ser detonante de su mal humor, (e incluso a veces de referencias que solo el entiende, por lo que una conversación amigable puede convertirse en un campo de minas sin que apenas te des cuenta).

    Ha terminado los exámenes de recuperación. De las tres asignaturas suspendidas, ha aprobado una, lo suficiente para pasar de curso. Hemos estado trabajando con el en  verano, pero no puedes acompañarle a los exámenes y creo que es ahí donde falla, porque los conocimientos los tiene, pero para el no  es relevante. Le interesan sus temas, el resto no es que carezca de sentido,es que simplemente, no existe.

    Sus compañeros empiezan a conquistar parcelas de libertad que a el, por miedos propios en general, le están vedadas y al verse alejado de ese grupo, busca apoyo en gente mas joven que aun comparten sus aficiones y están dispuestos a seguirle la corriente mientras puedan estar un rato jugando a la play station.

     Y con la adolescencia llega imperdonable la oleada de atracción hacia el sexo opuesto. Es un tema tabú que no se puede mencionar en su presencia , pero a veces hasta incomoda la fijeza con la que se queda mirando a alguna chica sin articular palabra ni gesticular y si llega hacerlo, de un modo tan mecánico que aun sorprende mas que su silencio.

  

    Empezamos nuevo curso.

Fin de curso

    Termina un nuevo curso académico y en las notas se ve de nuevo el toque mágico de los docentes. Con cuatro suspensos en la primera evaluación y seis en cada una de las dos siguientes, el resultado final es de tres asignaturas pendientes para septiembre, de modo que asimilar estos resultados sin asumir la amplia benevolencia de los enseñantes, seria ridículo.

    Es difícil achacar los resultados reales a un factor concreto y a mi parecer,creo que el Sindrome de Asperguer poco tiene que ver en ellos. Quizá sea mas un problema del TDAH, pues aunque pasa las tardes enteras en su cuarto, se supone que haciendo deberes, yo se que en todo ese tiempo, menos del ochenta por ciento esta concentrado en ellos. Ha habido incluso exámenes preparados a conciencia en los que apenas ha contestado por distracciones que agotaban su tiempo de respuesta y deberes que ha olvidado llevar después de hechos, Su mundo es ajeno y distante, de modo que los resultados han sido mucho mejores de lo esperado. (De nuevo mi agradecimiento a todos sus educadores).

   Animicamente tampoco ha mejorado. Mas al contrario, en ocasiones se muestra taciturno, tiene cambios de humor repentinos que a veces manifiesta con golpes inesperados y suponemos que se debe al difícil transito de la adolescencia. Sin embargo por momentos nos parece que sus pautas se acercan mas al espectro autista de lo habitual. Y no solo por sus cada vez mas repetitivas charlas sobre un solo tema de interés, que llegan a tal hastío que uno acaba contestando con monosílabos mecánicamente, sino también por sus gestos y maneras como la mirada desviada, la oscilación involuntaria de la cabeza, sus conversaciones en solitario y su cada vez mas a menudo atención perdida.

   Sus relaciones se estrechan por momentos.Los chavales de su edad tienen otros intereses y empiezan a moverse con una autonomía de la que el no dispone, pero aun encuentra el contacto social en menores que el, dispuestos a seguirle la corriente y obviar sus rarezas, aunque me pregunto cuanto tiempo duraran también estas relaciones. Queda por delante un largo verano para comprobarlo

    Nos decimos que si el Sindrome de Asperguer no puede mejorar, tampoco debería ir a peor,¿verdad?

Catorce años

Nos encontramos en la frontera de la Secundaria, en plena adolescencia y enfrentándonos a una personalidad que lejos de corregirse con la edad, (es curioso, pero a pesar de que quienes conocemos lo que es el Sindrome de Asperguer, sabemos que como tal es intratable y sin embargo, nuestro subconsciente siempre nos lleva hacia ese espejismo en el que creemos que con los años ira remitiendo hasta desaparecer),sigue  persistente con esas obsesiones monotematicas, esas preguntas repetitivas tan fuera de contexto que a veces, incluso conociendo el barro que pisas te descentran y esas conductas que solo por conocidas son aceptadas.

    Hay que aceptarlo: Caminas sobre una fina capa de hielo, intentando dar explicación a algo que el no entiende, (y tu tampoco, para que nos vamos a engañar) y te conformas con que las aguas no se agiten demasiado.

    A nivel académico el tema no va bien y es una manera suave de decirlo. A punto de terminar el curso, espero un mínimo de cinco asignaturas suspendidas,(no es un presagio difícil dada su trayectoria) y sin embargo el disfruta yendo al instituto, no tiene quejas de ninguno de sus compañeros, (Aunque tampoco ha sido invitado a ningún cumpleaños, algo ya habitual) y se lleva muy bien con todos sus profesores a quienes incansablemente aborda con los mismos temas repetitivos.

    No se vosotros, pero yo firmo. Ya veremos que pasa en septiembre con las asignaturas, pero lo que era mas importante a mi modo de ver, el acoplamiento tanto de el, como de los demás, parece totalmente satisfactorio,(vale, quizá desde mi perspectiva no me lo parezca, pero desde la suya si y eso es lo que importa)

   En dos semanas las notas.